Las cifras del comercio electrónico en Hungría son pequeñas si las comparamos con otros países de su entorno, pero lo cierto es que en los últimos años el número de consumidores online, la frecuencia de sus compras y el gasto realizado se han incrementado significativamente.
Así, con una población de 9,7 millones de habitantes, son cerca de 3,8 millones los húngaros que ya compran online habitualmente. Según datos de eNET, el año pasado se gastaron en e-commerce 3.110 millones de euros y la previsión es que esta cifra crezca a un ritmo anual del 9,5% hasta 2020.
Los húngaros no compran solo en tiendas nacionales. La amplia gama de productos y los buenos precios de las tiendas online extranjeras les atraen cada vez más. Así, un 31% de ellos compra en webs de otros países europeos, y el gasto realizado en ellas ascendió a 1.280 millones de euros en 2017. Como es lógico, son los e-commerce de países próximos como Alemania, Austria, Polonia o Eslovaquia, los que más parte del pastel se llevan, pero también otros como Francia. Por ello, no es descartable que un e-commerce español fije su vista en este mercado centroeuropeo.
La electrónica de consumo encabeza la lista de productos más comprados por Internet en Hungría (el 34% de las compras). También se venden productos multimedia (11%), ropa y calzado (11%), electrodomésticos (6%) y menaje y mobiliario (6%). Por el momento, el gasto por consumidor aún es bajo (245 euros al año, frente a los 1.954 euros que nos gastamos los españoles). Con todo, se espera que siga incrementándose hasta los 326 euros en 2022, según previsiones de Statista.
Formas de pago preferidas
A diferencia de España, a la hora de elegir cómo pagar sus compras, en Hungría todavía sigue muy presente el pago contrarreembolso, que es mayoritario (lo usan el 52% de los consumidores). También utilizan tarjetas de débito de bancos locales, monederos digitales y transferencias bancarias.
En cuanto a los aspectos logísticos, tres de cada cuatro internautas húngaros prefieren que sus envíos se entreguen en casa (74%), un 32% elige ir a un punto de recogida, un 26% a la oficina de correos y otro 19% que se entregue en el lugar de trabajo. DHL Parcel tiene presencia en el país a través de su socio local Magyar Posta, que cuenta con 3.200 puntos de recogida en todo el territorio y tres centros de distribución.
Según un estudio realizado por eNET, el 82% de los encuestados dice que los costes de envío son el principal factor que valoran a la hora de elegir un método de entrega. Por su parte, a la mitad de los consumidores les influye en su decisión los plazos de envío.
Particularidades
Precios e idioma son dos de las principales particularidades de este mercado centroeuropeo. Hay que tener en cuenta que Hungría no pertenece a la zona euro, por lo que los precios de nuestros productos deberían ir marcados también en la moneda local, el florín húngaro. Y por supuesto, los contenidos y la atención al cliente deberían ser en su propio idioma, por lo que habremos de contar con personal nativo o traducciones profesionales para poder competir con garantías.
Más allá de estas diferencias, al ser un país miembro de la Unión Europea, se aplican las mismas normas de protección de consumidores y de protección de datos.
Hay que destacar que si nuestro negocio supera un determinado nivel de ventas en Hungría, habremos de pagar el IVA local. El general está en el 27%, el reducido en el 18% y el superreducido, que se aplica a alimentos básicos, productos farmacéuticos, o libros, en el 5%.
Para sondear los gustos locales en cuanto a diseño web, ofertas que triunfan, etc. no está de más echar un vistazo a lo que hace la competencia. En este sentido, tiendas locales como Extreme Digital, Vatera, Ujje, Jofogas, Arukereso o Libri-Bookline, y otras internacionales como Media Markt, Tesco o Aliexpress son algunas de las más populares entre los consumidores húngaros.
En resumen, aunque el gasto online de los consumidores de Hungría aún está lejos del de otros países europeos, su comercio electrónico está creciendo a buen ritmo y en él las tiendas extranjeras tienen mucho que aportar.