Un enlace, o link, permite trasladarse, o bien desde una página concreta de un sitio web hasta otra, o bien hacia un sitio web distinto. Estos dos tipos de enlaces son los llamados internos y externos, respectivamente. Descubre las diferencias entre ellos y por qué ambos son importantes para la estrategia SEO de tu sitio web o e-commerce.
Enlaces internos: se trata de los links que se encuentran dentro de un mismo dominio y que enlazan con otras páginas del mismo. Los enlaces internos principales son aquellos que forman la arquitectura de la navegación principal y crean de esta forma una jerarquía de información a través del menú. De esta forma consiguen que la autoridad del dominio se reparta entre las distintas páginas que forman la web. Los links entre contenidos o artículos del mismo dominio son muy importantes porque crean una red de páginas enlazadas entre sí, con una doble función: por un lado, permiten potenciar la navegación dentro de la web, ya que, de esta forma, el usuario se mueve de contenido en contenido. Por otro lado, los links internos también son positivos para el posicionamiento en motores de búsqueda, ya que el enlazado entre páginas permite a estos motores entender mejor la relación entre ellas, facilitando el recorrido (o crawl) a través de las mismas. Un elemento fundamental de los enlaces internos son los anchor texts, es decir, el texto clicable que contiene el hipervínculo. Es muy recomendable utilizar las palabras clave en el anchor text ya que esto ayudará a posicionar la página para estas keywords.
Analiza los links internos de tu página web para llevar un control sobre ellos y descubrir si puedes optimizarlos y si tu estrategia de enlaces es coherente. Para ello debes comprobar que el número de links se reparte de forma más o menos homogénea a lo largo de toda la web, que no hay enlaces rotos y que utilizas palabras clave en tus anchor texts. Para detectar tus enlaces internos puedes utilizar herramientas como Google Search Console o Screaming Frog.
Enlaces externos: también llamados backlinks o enlaces salientes, son los links que enlazan dos dominios distintos. Al ser uno de los ranking factors de Google, estos enlaces resultan extremadamente beneficiosos para la mejora del posicionamiento orgánico. Hay varias razones que justifican su importancia: la primera es que facilitan la indexación a los motores de búsqueda, permitiéndoles encontrar nuevos contenidos saltando de enlace en enlace, por lo que cuantos más links hayaelvalordelaentrega.com/los-ranking-factors-de-googlehacia tu página, más probabilidades tendrás de que Google la encuentre. Otro beneficio es que los usuarios también tendrán más probabilidades de encontrarte: si leen un artículo en el que hay un link hacia tu web, les dará la oportunidad de visitarla. Finalmente, otra razón de peso para el uso de los backlinks es que permiten la transmisión de autoridad de dominio o link juice. Esta es la autoridad o prestigio que un sitio web transfiere a otro cuando enlaza con este. De esta forma, Google interpreta que si otros sitios han decidido hablar de tu página en su contenido y enlazan con ella, es porque tiene contenido relevante. Por último, cuantos más backlinks y de mayor calidad sean éstos (es decir, que vengan de sitios web con gran autoridad de dominio), más beneficioso resultará para el posicionamiento SEO de la web con la que enlacen.
Linkbuilding: se trata de la técnica que consiste en conseguir enlaces externos para una página web con el objetivo de mejorar el posicionamiento orgánico de la misma. Es muy importante que se lleve a cabo de forma natural, es decir, de forma progresiva y proporcionada. Además, no es recomendable comprar este tipo de enlaces ya que si Google lo descubre (o tiene sospechas) podría penalizar a tu web.
En definitiva, estos dos tipos de enlaces son muy positivos para tu página web, tanto a nivel de navegabilidad como para el posicionamiento SEO. Optimiza tus links internos y aplica una estrategia de linkbuilding para que tu página web aparezca entre los primeros resultados.